El último rey demonio.
Prologo:
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El último rey demonio.
Muy pronto se acerca el final. Desde este tejado admiro el mundo que
ha sido creado. Los humanos son cada vez más. Sus inventos progresan a
cada minuto más. Mi mundo ha sido destruido. Hasta su última llama
ardiente ha sido apagada. Todos sus cautivos fueron liberados. Mis
hermanos y hermanas han muerto en la última gran batalla. Yo logre
escapar gracias a que nunca se supo mi verdadera forma. He visto como
mi hermoso corcel fue decapitado. Mi madre destazada en miles trozos y
esparcida por el basto universo. Mi padre nos ha dado la espalda y la
orden de acabarnos. Nuestro rey, por el cual fuimos leales en su
lucha, nos ignoró al ser perdonado por nuestro padre.
Vago todos los días por estas calles. Apenas como algo. Y me tengo
que mantener escondido entre los callejones y estos humanos. Tengo
hambre ya no puedo aguantar. Encuentro a un hombre. Él está en un
callejón forcejeando a una mujer. La trata de perra y la sostiene
contra la pared. Su alma se torna oscura. Sus decesos son impuros y
corrompen su ser.
Manosea su cuerpo y levanta su falta. Ella tiene miedo, llora y no
tiene fuerza para zafarse de su brutalidad. Suelta su pantalón y deja
escapar todas sus intenciones de abusar. Su alma es tan oscura, no
puedo resistirme a mi hambre voraz y mi boca babea por un mordisco
más. Me acerco lentamente, tambaleando y sin poder resistirme más.
— Hambre, hambre, tengo mucha hambre.
— ¿Qué quieres? Vete a molestar a otro lado drogadicta. No ves que
estamos ocupados — la suelta y golpean haciendo que caiga inconsciente
sin poder hacer nada más—. Te dije que te fueras —Se acerca a mí y me
intenta golear—.
— esquivó su golpe— Eres un alma sucia y asquerosa. Mi hambre ya no
puedo aguantar —una risa oscura retumba al final —.
— ¿Y qué crees que puede hacer tu? No eres más que un espanto decante
en este callejón —me golpea fuertemente y me derriba—. Luego de
terminar seguiré contigo —se ríe cruelmente y vuelve a su acto oscuro
y asqueroso—.
Se da vuelta y al escucha que yo me levanto. Diciéndome
maldita perra se voltea y me intenta patear. Al ver mi verdadera
imagen oscura y forjada por el fuego del infierno cae sentado del
terror que no puede evitar. Me acerco a él con mis uñas largas y
oscuras. Mi apetito voraz ya no lo puedo evitar y lo debo saciar.
Intenta levantarse, pero su alma oscura y pesada no lo deja
reaccionar. Siente el frio, impotencia y tristeza que ha provocado a
lo largo de su asquerosa vida. Me acerco cada vez más. Abro mis
grandes fauces con dientes filosos y desde sus pies lo comienzo a
tragar lentamente. Su llanto y grito es una canción hermosa que mis
oídos aman escuchar. Su desesperanza y terror es el sentimiento que
amo saborear en cada bocado que le hago a su alma asquerosa y oscura.
Ya no grita más. El silencio de su final calma mi habré voraz y su
sangre calma mi sed, pero me da deseo de querer más. El sabor de su
alma lo disfrute con cada bocado más.
Salgo del callejón y dejo a la mujer descansar. Cuando despierte todo
ya habrá pasado y el jamás la volver a tocar.
Hago barias cuadras con una gran felicidad. Al poco tiempo me percato
de unos pasos repetitivos detrás de mí. Noto que unos hombres de traje
y con gabardinas grades me siguen sin cesar. Comencé a correr entre
calles lluviosas. Ellos empiezan a correr detrás de mí.
Tengo miedo. Se quiénes son y quiero escapar. Atravieso callejones
para lograrlos despistar. Sombras de alas se unen para perseguirme y
no perderme jamás. Solo fue un bocado nada más. ¿Por qué les importa
un alma sucia de maldad? Un alma sucia menos que lastimara este mundo
tan hermoso que posee la humanidad.
Entro a un almacén abandonado y sierro sus puertas para que no me
logren atrapar. Me encuentro en el centro de ella, buscando una salida
por la cual escapar. Sombras de hablas se reflejan en las ventanas.
Golpes en las puertas trabadas retumban en el eco del lugar. Un
rechinar de barandas metálicas se escucha por detrás. Mi instinto me
obliga voltear para descubrir que alguien me pudo encontrar.
— Vaya, vaya ¿Qué tenemos acá? Presencia oscura, come almas para
vivir y no deja ver su apariencia. Debe ser Beleth.
— No sé de qué está hablando señor. Y solo soy un
vagabundo.
— Beleth te hemos buscado por mucho tiempo. Eres el único demonio que
falta. Y te has salvado por que nunca supimos tu verdadera forma. Pero
ya te tenemos rodeado. De acá no vas a escapar. Todas tus legiones y
hermanos fueron erradicados ¿A dónde piensas huir? El infierno ya fue
apago y su rey los ha entregado.
— se me caen las lágrimas oscuras e infernales —Está bien me tienes —
me doy vuelta al sacar mi capucha muestro mie verdadera forma —. ¿Cómo
estas Amenariel? Saca tu espada, solo luchando me podrás
atrapar.
— ¿Crees poder contra mí? Que demonio patético te has vuelto.
Interesante, tu forma es muy femenina y agraciada en verdad. De seguro
te a ayudo a escaparte cuando callo el infierno tras la gran guerra
espiritual ¡Pero esta vez no pasara! —saca su espada y se tira a
atacar—.
Levante mi mirada y saco mi enorme espada oscura para luchar.
Amenariel ataca desde arriba y yo defiendo su ataque con mi espada.
Extiendo mis alas negras, ya no puedo ocultar mi presencia. Lo golpeo
con mi puño en la cara haciendo que salga disparado contra un muro. Me
levanto en vuelo y dejo caer mi capa negra. Doy a mostrar toda mi
verdadera forma real. Con mi largo cabello plateado, rasgos femeninos
detallados, mi armadura infernal y mis grandes alas negras. Las cuales
ya no las pienso ocultar.
—Mira Amenariel esta es mi verdadera forma. Prepárate por que será la
última vez que las veras.
— Sonríe y se prepara para atacar—Deberías rendirte sucio demonio.
Vayas donde vallas habrá un ángel y arcángel persiguiéndote. Tu raza
está acabada — ataca —.
Defiendo sus feroces ataques con mi gran espada. Golpes van y golpes
recibo. Me tira a un lado de un golpe de su puño y arremete
rápidamente con el filo de su espada. Lo veo venir y extiendo mi mano.
Sin pensar dejo que se escapen rallos oscuros de la palma de mi mano.
Golpeo directa y cruelmente a Amenariel y a todo el lugar destrozando
sus paredes y techo.
Mi presencia ya está más ubicada. Amenariel cae fuertemente al piso,
sin poder levantarse y pelear. Me acerco a darle el golpe final. Mi
ira fluye por mi espada. La sensación de venganza dibuja una gran
sonrisa de felicidad.
Luces caen del cielo. Cuando voy a dar mi golpe final una espada lo
detiene. Un ángel evita la muerte de Amenariel con todas sus fuerzas.
Pero no resiste mucho el golpe y sale desplazado para un lado por mi
desbastadora fuerza. Me encuentro rodeado de cientos de ángeles e
iluminado por sus brillantes armaduras. Mi locura empieza a oscurecer
cada vez más el lugar. Con una enorme sonrisa dibujada les digo vengan
ya. Pienso acabar con todos sin dudar.
Me atacan de todos lados y se lanzan con sus gritos de guerra.
Choques de filos divinos retumban en mi gran espada, pero ninguno
logra tocarme jamás. Me rodean dejando poco espacio para bolar. Abro
fuertemente mis alas haciendo que todos salgan disparados por mi
desbastadora oscuridad. Intenta cortar mis alas virtuosas, pero sus
espadas se quiebran al solo golearlas. Golpeo a todo el que se me
acerca haciendo que se choquen con muros, edificio y todo lo que se
encuentro en el camino. Soy una enorme oscuridad entre pequeñas luces
que se van a pagar. Corto, destrozo y destazó alas. Remato al que me
da la espalda atravesando sus débiles armaduras con mi hermosa espada.
Dejo caer sus cuerpos destrozados por mi ferocidad. La masacre es mi
baile y el color de sangre divina mi pintura con la cual he hecho esta
obra de arte. Cientos de cuerpos de ángeles Pintan el suelo debajo de
mí. Siento el terror de Amenariel y la impotencia de no poder luchar.
La felicidad inunda mi ser y la oscuridad se expande cada vez
más.
— Con esta fuerza inútil piensa detenerme. Soy La tercera reina del
infierno. La comandante con mayor cantidad de legiones infernales. Mi
oscuridad es enorme y ya no la contendré más.
Grandes luces caen del cielo y toman forma al tocar el terreno. Miran
a Amenariel mal herido y la masacre de cientos con la que he pintado
el suelo. Al tomar más forma dan a conocer sus identidades. Y veo que
me rodea los siete arcángeles Miguel, Gabriel, Rafael, Zadquiel,
Chamuel, Jofiel y Uriel. No se molestan en decir una palabra. Uriel y
Jofiel rodea la zona con una jaula echa de su luz preciosa. Impiden
que mi oscuridad se expanda más.
Migel saca y reluce su espada divina. Al atacar no retiene su
poder y libera toda su luz dina en un solo golpe. Yo al defenderme su
filo divino rompe mi gran y destructora espada. Gabriel y Rafael
sostiene mis alas extendiéndolas para dejarme quieto en el aire sin
poder hacer nada. Chamuel y Zadquiel las cortan y destrozan sin piedad
y sin dudar. Caigo al suelo velozmente. No puedo escapar sé que este
es el final. Rompo en un llanto lúgubre e infernal.
— con lágrimas cayendo — ¿Por qué? ¿Qué le hemos hecho? ¿Esto qué
diferencia tiene a un genocidio? ¿No lo es por el hecho qué ustedes lo
hacen a una raza qué la mayoría cree que es malvada? ¿Rey por qué nos
has abandonado? Nosotros solo limpiábamos el mundo de almas impuras. A
ningún humano obligábamos a hacer esos horribles actos. Ese era su
libre albedrío. Ellos tenían la decisión al final de hacerlo o no
hacerlo. Pero como son unos cobardes y no aceptaban la responsabilidad
de sus errores nos echaban la culpa. Y al ser los únicos que los
castigábamos nos empezaron a matar. Nuestra justicia verdadera e
igualitaria y no hace diferencia por raza, dinero o convicción.
Siempre se subyugada a todos aquellos que busca justicia verdadera. Y
promueven la justica por conveniencia — los arcángeles se preparan
para acabar con su vida —.
— Soy el ultimo demonio castigador de almas oscuras. Ahora les
quedara a ustedes la tarea de controlar la oscuridad que surja entre
los humanos. Yo moriré y el mundo se llenará de su luz. Pero mientras
más luz allá la sombra detrás de los iluminados será más pura. Y más
sobras libres rondara a la humanidad.
Amenariel se levanta con su espada y por la espalda atraviesa el
corazón oscuro de Beleth. Cae ya cansada de huir, cansada del hambre y
la sed que no podía saciar. Cansada de pelear. Y con una sonrisa de
felicidad por su final, que le dará paz. Su cuerpo se queda tirado en
el suelo y siendo abrazado por las ultimas brisa de aire que logra
disfrutar. Y la luz ilumina cada rincón de este mundo.
Fin.
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Para mi lector:
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género, dándome un personaje o situación. Y yo la escribiré sin
problemas. Ya que la creación de mis relatos es para probar, aprender
diferentes géneros y salir de la zona de confort.
Espero tu desafío. Y porque tú también eres una gran parte de mi blog.
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